(Prensa Librerías del Sur).- En el corazón del Festival Viva Venezuela, Mi Patria Querida, se puso en evidencia el talento de los artesanos venezolanos, quienes una vez más han traído consigo la esencia de nuestra rica cultura y tradiciones. Tras cuatro días de disfrute y goce con música, cantos, danzas y las artesanías de tradición de los estados orientales del país, cerraron con la identidad cultural más viva que nunca.

Se pudo compartir con 337 artesanos, quienes demostraron que este encuentro no solo celebra la diversidad de nuestro país, sino que resalta la habilidad y el amor que ellos infunden en cada obra que crean.

14 conversatorios y 23 demostraciones de oficios artesanales, fueron un punto de encuentro donde los artesanos y artesanas presentes hicieron gala de sus conocimientos a más de 50 visitantes a quienes fueron receptores de los conocimientos culturales tradicionales e indígenas venezolanos.

En la exposición, se pudo constatar como las manos creadoras de nuestros artesanos cuentan historias que trascienden generaciones. Desde la colorida cerámica de los pueblos indígenas hasta la delicada filigrana que adorna nuestras joyas, cada pieza es un testimonio de la historia, la lucha y la belleza de la vida cotidiana en Venezuela. Asimismo, ver a estos artistas en plena acción, moldeando la arcilla o trenzando fibras naturales, es un recordatorio tangible de que la creatividad es un lenguaje universal que nos une a todos.

Hay que destacar que, 4104 artesanías estuvieron en este cuarto capítulo del Festival Mundial Viva Venezuela, cosa que se demostró por los stands repletos de obras únicas siendo mostradas por sus elaboradores, creando de esta manera un ambiente festivo, donde cada sonrisa era un agradecimiento silencioso por la riqueza cultural que nos envuelve.

Diez fue el número de las expoferias realizadas en esta cuarta gran fiesta cultural realizada en el oriente del país, donde asistieron más de 50 personas.

Más de 100 personas, entre ellos habitantes de la región y viajeros, arribaron al oriente venezolano donde disfrutaron de esta fiesta cultural que, en su cuarto capitulo, es considerada un éxito rotundo. Además, algunos reafirmaron su latido cultural y en otros nació un corazón artesano que rápidamente latió con fuerza.
El presidente constitucional, Nicolás Maduro Moros, firmó el decreto para autorizar la logística legal que permita la instalación del Centro Nacional de Artesanía, así como la orden de canalizar compras públicas a los artesanos de la República Bolivariana registrados en la Gran Misión Viva Venezuela, Mi Patria Querida.
“Para instalar el Centro Nacional de Artesanía y sea el ente articulador y de apoyo al Movimiento Nacional de artesanos y artesanas, del movimiento Corazón Artesano. ¡Firmado, cúmplase! Ernesto (Villegas), lo dejo en tus manos”, expresó el jefe de Estado desde la Casona Cultural Aquiles Nazoa, en Caracas, donde presidió el encuentro con los equipos promotores estadales de la Gran Misión Viva Venezuela.
Destacamos que también aprobó a través del Servicio Autónomo de Propiedad Intelectual (SAPI), la certificación de manera gratuita todas las obras artísticas, literarias y científicas de los cultores registrados en la Gran Misión “Viva Venezuela, Mi Patria Querida”.
Igualmente, se instalará el Centro Nacional de Artesanía para apoyar a este importante sector, y se instruyó también la compra priorizada en todos los ministerios y entes del Estado, de las artesanías y los juguetes fabricados en Venezuela y se ordenó abrir las escuelas y liceos a la Gran Misión.
Tras 4 días de disfrute y goce de la música, los cantos, las danzas, la artesanía y la gastronomía de tradición de los estados orientales del país, el Festival Viva Venezuela cierra con la identidad cultural más viva que nunca y un Corazón Artesano más fuerte.
Sin duda alguna, la cuarta edición de este Viva Venezuela fue un verdadero homenaje a todas esas manos laboriosas que día a día trazan el camino de nuestra identidad cultural. Al finalizar, quedó en el aire una promesa: la de seguir apoyando a nuestros artesanos, empoderando sus voces y garantizando que su legado perdure en el tiempo.
Prensa MPPC